jueves, 28 de mayo de 2009

El amor esta en aprietos.

Parte 1. La despedida.
La carretera parecia espiral, el auto en el que viajaba literalmente mi sueño, mis pestañas y otra que otra desesperanza flotante; parecia una lancha con llantas, era tan volatil como un bonche de plastilina, como una hoja de papel hecha barco en medio de un charco de agua manantial.
En ese entonces miraba con una preocupacion tán tremenda la carretera, mucha adrenalina y un enorme hueco en el pecho; me dirigia a una dulce despedida; junto a mi jumento lleno de toxicos se encontraba la precensia mas hermosa que debastaba mi umbral y enamoraba mi estadía desconocidamente extraña, se encontraba ella. Pero el viaje en el auto era tan despampanante como adrenalinomano que ni siquiera la volteaba a ver, en ese entonces intuí que me volveria un adicto a las velocidades y al desenfreno.

Era un clima perfecto y pintado adrede, ¿era una mañana fresca? o una tarde nublada, eso si con riscos en el lago de cristal. En el momento que bajé mis tenis con pies del auto, me sujetó fuertemente la melancolica nostalgia (no queria que ella se fuera); el entorno era cruelmente adornado con puestesitos folkloricos, con el murmullo de las personas que tambien despedian algo o a alguien. No recuerdo bien pero ella buscaba con desmesura algo que comprarme para que me acordara de "ella", de reojo miré y tocaba con cansansio artesanias hechas por las manos de gente eterna del lugar, gente que talvez con algun pretexto se ha quedado en ese bello sitio a esperar a sus mitades, y lo perfectible era crear el victimario del osio a base de instrumentos que intencionadamente regala la naturaleza, artesanos pues. Yo ya tenia algo que darle, en mi cartera escondía un minisarcofago tipo llavero que me habria robado de algun otro loco sueño.

Me llevaba un paso de diferencia, yo miraba su cabello perfecto a mis pestañas, me enamoraba desenfrenadamente cada segundo de cada particula que la conformaba, sus ropas, su andar, su estatura, su color de piel; su rostro. Su paso a medio presurar solo dice que le urge irse, que le duele la circunstancia, que le doleré. Ella voltea a verme y con una peculiar seña me da una sonrisa de fotografia y pone pause a sus pasos, yo termino por alcanzar la distancia y quedamos frente con frente, respiro con suspiro, ojo con pupilo...mi corazon se ha vuelto un beat y solo enmudezco mi lengua y le regalo mi eterna atencion nublada.

-Mira, te compré este grabado, es bastante lindo como para que lo conserves en tu haber, anda es nadamas para ti-
(Era como un pedacito de cantera y en ella estaban grabados dos querubines, ¿un niño y una niña?, creo)

-No te hubieras molestado, pero gracias, se quedará en mi cuarto para siempre- Le dije con una voz que no era mia, y prosegui:

-Mira, yo te quiero dar esto que se te encantará, me lo robe de otro sueño y es solo para ti-

Ella se quedó con una sorpresa indiferente, pero una sorpresa triste. Creo que talvez ella no queria nada mio o que viniera de mis manos o algo asi, ella no lo necesitaba, me tenia tan dentro de si, que lo demas o lo extra eran adornos que le abririan una horrible cicatriz, si claro, una eterna herida. Eramos cursis, pero cursis extraterraqueos.
Seguiamos caminando hacia el lugar exacto donde se desprenderia de mi ente, donde se escaparia del mundo mortal y misero, donde la despediria pues. En un momento quise correr y no ver como se me va otro lindo sueño, como se me va la mitad de mi linda e incuerda existencia, pero me arrepentí y termine por tomarle el brazo y soltarle las palabras que tenia en lo mas oscuro del corazon:

-La verdad no quiero que te vallas, no quiero estar lejos de ti, ni sentir la horrible distancia y su mesquino olvido, ni el asedio del tiempo comiendome con tu amnesia, quiero esperarte al fin del infinito y cuando tu vuelvas, ser todo lo que hemos querido ser- Dije a bocanadas de ospiros, con ansias, con dolor.

-¿Ah si? ser lo que siempre hemos querido ser...ya no andes con tantos circulos Luis y dime las cosas claras-

-Si, si, si! ser novios; ¿No te gustaria?-

-Sabes que si...-

Agachó la mirada, como si la tristeza la jalara con un ancla del tamaño de Groenlandia, y siguio caminando. ¿La bese? no recuedo, pero aun siento su boca acariziandome el quicio de mis labios, hundiendonos en la inmensidad del lugar, en las nubes cristalinas y en el cielo machacado por los icebergs y los osos polares acostados viendo esa hermosa pintura. La extrañé apartir de ese roce interlunar. Tomó como por medio metro la delantera y seguimos caminando, mi vista francotiradora se pausó en su cuello hecho una minima constelación de lunares y por esa mascada arabe que le adornaba desde su cabeza hasta parte de los hombros. Ingenuo de mi yo, porque procesaba dulcemente la idea de amarla. Ella lo escuchaba, a escondidas escuchaba mis pensamientos, ¿porque diablos se fue?

-Mira, Mamá tambien vino a despedirme!- Dijo ella, calmando su prisa en los pasos.

-Hola señora, mucho gusto en conocerle, yo soy Luis.- le dije como con el tono de "si, ya habia oido hablar del tal Luis"

Ella, nadamas asintio con la cabeza; como cuidando otras cosas, detalles de partida de su hija, como cuidando el tiempo, como cuidando los recuerdos en un baul, como cuidando el buzón de su memoria. Se me adelantaron y casi las pierdo de vista, entre tanto tumulto, entre tantos manojos de sentires, ella volteó, no su mamá si no ella!!! y como adivinando todas las cosas se despidió de mi, si, de lejos; con la sonrisa mas bella entre las sonrisas y los ojos llenos de nostalgia, de melancolia, de tristeza, de incertidumbre y de una, dos, tres lagrimas: se fue, heme ahi, vencido entre los miles de destinos que corrian al trance. Nunca entendí a donde se iria, que pasaría con ella, en un intento loco y desesperado de responderme a mi mismo, fue proponerme la idea de que ella se transformaria en uno de esos osos polares y pasaria ser la belleza natural que adorna la pintura en donde la despedí. Disfruté por ultima vez todo el paisaje que me rodeaba, algo como un paraiso nordico y caminé a la entrada en donde se supone habiamos dejado el auto donde llegamos.

Un paso sobre otro, los tenis ya ni me importaban y me daba igual su estetica, otro paso, otro segundo, otro, otro, otro... se desvaneció todo el entorno, se fue oscureciendo como cuando se acaba una pelicula en el cine, y se apagan todas las luces.

Y abri mis ojos, desperté. No habia osos polares ni artesanos eternos. Habia un edor a dormido en la cama. Dolia.

Me levanté decidido a bañarme para ir a fabricar otro dia de escuela, otro dia en el diario de mi existencia; otra foto pues. Pero no he logrado desprenderme. No concilio, no.

A partir de ese encuentro me he preparado para el viaje y emprender la busqueda del enamoramiento perdido en la fantasia de un sueño. He tomado mi mochila con mi camara, una botella de alcohol, una caja de cigarros, mi celular, un par de libros, mi biblioteca musical y una que otra fanfarie para buscarla. ¿Que tal si mi novia, o mi futura novia esta encerrada en un sueño, gritando mi nombre, desesperada...esperando-me?

....

1 comentario:

púrpura dijo...

"..nunca resistí las despedidas porke en cada una de ellas se marchita la voz de todas las personas ke yo he sido y ya no puedo ser.."

por eso no me gustan.. es desprenderte de algo a lo que sin kerer te acostumbras.. te gusta ser kien eres con esa persona.. a recurrir a alguien ke sabes ke esta ahi pensandote.. pensandose.. pensandonos..
una costumbre bonita como dirian por ahi..

algo asi..
tq!!